Otras propuestas en la nieve
La nieve permite múltiples posibilidades.
La nieve permite múltiples posibilidades.
Los más pequeños son felices deslizándose por las laderas nevadas en sus trineos.
¿Ir en bici sobre la nieve? Esa es la atractiva y divertida propuesta del snow bike.
¿Emular a los participantes en el Rally Los Lagos? Algo así es posible con el ice karting.
El ‘speed riding’, una nueva modalidad deportiva surgida en los Alpes, permite disfrutar de sensaciones nuevas sobre la nieve.
Las motos de nieve son otra apasionante propuesta que permite aunar dos pasiones, la nieve y el motociclismo.
Otra opción, y más si nos gustan los animales, son los paseos en trineos tirados por perros.
Las raquetas son lo más parecido al senderismo sobre la nieve.
El Pico Gallinero domina la estación de Cerler y con sus 2.630 metros la convierte en la segunda estación más alta del Pirineo.
El surf de nieve también tiene su protagonismo en el mayor dominio esquiable del Pirineo aragonés.
La estación más veterana del Pirineo ha estrenado un snowpark, situado en la zona de Tobazo Bajo, en un lugar de cómodo acceso.
Siempre pendientes de los amantes del ‘snow’, Astún ha ampliado el área del ‘snowpark/freestyle’ en la zona de Sarrios, duplicando su antigua superficie y dotando de nuevos módulos y saltos, configurando una amplia zona dedicada por completo al surf de nieve.
El Pirineo blanco descubierto sobre los esquíes, movidos por la fuerza del aventurero que se adentra en montañas y bosques. Sin restricciones, elige el momento y el lugar para una experiencia mágica.
Naturaleza en estado puro. Tresmiles y nieves perpetuas rodean las praderas de Llanos del Hospital y Plan d’Estan, en las que se marcan los circuitos aptos para todos los niveles, al igual que en el Plan de la Besurta, en la zona más alta de la estación.
En el corazón del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, la estación de esquí nórdico Fanlo-Valle de Vio ofrece un total de 22 kilómetros esquiables con recorridos para todos los niveles.
Felquera, Pradas, Ronatiza y Mañaneto, los nombres de los cuatro recorridos que ofrece la estación de esquí de fondo de Pineta, toda una variedad de trazados adaptados a todos los niveles.
En un idílico entorno, rodeado de circuitos termales, las pistas de esquí de fondo del Balneario de Panticosa permiten disfrutar de esta disciplina en su estado puro.
Los espectaculares parajes de La Zapatilla y Loma Verde amparan el circuito de fondo de Candanchú, situado en la zona de La Rinconada.
Hayedos y pinares escoltan el circuito de esquí de fondo de Gabardito, en el valle de Hecho.
La mole caliza del pico Bisaurín se convierte en vigía y guardián de las pistas de esquí de fondo de Lizara, situada a 1.540 metros de altitud en una extensa llanura sin árboles.
En un marco incomparable y lleno de magia por su gran belleza natural, el circuito de Linza es esconde en el interior de un hayedo.
Dominando el Valle de Benasque, Cerler es la segunda estación más alta del Pirineo, con una cota máxima de 2.630 metros del Pico Gallinero donde comienza el trazado de uno de los mejores descensos de España.
El mayor dominio esquiable del Pirineo aragonés, con praderas naturales y pistas aptas para esquiadores de diferentes niveles y exigencias: Cantales para iniciarse, Izas y Sarrios para esquiadores de nivel medio, y Tres Hombres para expertos.
Tubo de la Zapatilla, Tuca Blanca, Tobazo, Aludes, Navarros… son los nombres de algunas de las míticas pistas de Candanchú, la estación más antigua del Pirineo aragonés.