La nieve permite múltiples posibilidades.
Muchos esperan la caída de los primeros copos con la ilusión de poder hacer un muñeco de nieve, pero en las estaciones altoaragonesas esta opción va mucho más allá. La nieve permite construir un iglú, la vivienda tradicional esquimal.
Otras atractivas propuestas son el ‘paintball sobre nieve’, disparar bolas de pintura a otros jugadores con pistolas de aire comprimido, o el ‘tubbing’, descender una pista nevada con peraltes sobre un flotador especial.